Ayuntamiento de Jumilla

Esta planta fotovoltaica, ubicada en el triángulo entre Jumilla, Yecla y Fuente Álamo, generará alrededor de 80 gigavatios hora y supone el compromiso de todos los implicados por un futuro más sotenible

La nueva planta fotovoltaica Cerrillares I, ubicada en el triángulo entre Jumilla, Yecla y Fuente Álamo, cuenta con una capacidad de casi 50 megavatios y generará anualmente alrededor de 80 gigavatios hora, lo que equivale a la electricidad que consumen al año 21.000 viviendas. Situada en una extensión de 95 hectáreas, está compuesta por paneles solares bifaciales con una potencia de 650 vatios pico, lo que la convierte en una de las más importantes de la Región de Murcia.

La construcción de la planta ha supuesto una inversión de más de 30 millones de euros por parte de la energética italiana ENI Plenitude y ha creado alrededor de 200 puestos de trabajo durante la fase de construcción, aunque varios de ellos se mantendrán para el mantenimiento diario. Del mismo modo, la planta también contribuirá a la dinamización económica de la zona, al generar ingresos por impuestos y tasas locales.

La alcaldesa de Jumilla, Seve González, acompañada por el consejero de Medio Ambiente e Investigación, Juan María Vázquez, y el director general de Energía de la CARM, ha visitado las instalaciones de la planta fotovoltaica Cerrillares I, y ha explicado que: “Esto supone el compromiso de todos los implicados para dar prioridad a un futuro más sostenible, aprovechando las características de nuestro territorio en cuanto a horas de sol”.

Seve González, también ha afirmado que: “Su construcción y puesta en funcionamiento ha supuesto un gran impulso para el desarrollo económico de Jumilla debido a la política de contratación de empresas y trabajadores de la localidad que ha seguido ENI Plenitude”.

La nueva planta se ha instalado en las proximidades de un parque eólico en funcionamiento, aprovechando vías y caminos de acceso y minimizando la afección a las parcelas colindantes. La obra respeta las exigencias medioambientales con las paradas correspondientes para no afectar el periodo de anidamiento de las especies animales de la zona, para lo que se han construido primillares, refugios para murciélagos y charcas para anfibios.