Miles de jumillanos recibieron al Cristo Amarrado a la Columna a su llegada a la ciudad el pasado domingo. Es uno de los momentos donde se pone de relieve la devoción de todo un pueblo, ya que prácticamente todos los vecinos salen a la calle a recibir a su imagen más venerada.
El Cristo es trasladado en romería desde su morada habitual, el convento franciscano de Santa Ana de monte, hasta la ermita de San Agustín. Desde allí parte en procesión hasta la Iglesia Mayor de Santiago. Durante todo el recorrido, desde el monte, la imagen del escultor murciano va acompañada por miles de fieles, muchos de los cuales portan la talla religiosa a hombros.
El Cristo Amarrado a la Columna permanecerá en la ciudad durante toda la Semana Santa y participarán en la procesión de la Amargura de Jueves Santo y en la del Calvario de Viernes Santo por la mañana.