Alrededor de 90.000 litros de vino se repartieron entre los miles de asistentes a la Gran Cabalgata celebrada en Jumilla el pasado sábado. Un año más la alegría, la música y el color y sabor del vino inundó, durante unas horas, las calles de Jumilla.

El desfile partió sobre las siete y media de la tarde y finalizó dos horas y media después. A lo largo de todo el recorrido fueron miles las personas que bebieron el vino que ofrecían a los peñeros y que bailaron al son de la música.

Los visitantes empezaron a llegar a primera hora de la tarde desde distintas ciudades españolas, incluso alguno de ellos vinieron en autobuses para participar en la Cabalgata del Vino.

A pesar de la gran aglomeración de personas que se da cita todos los años, según las primeras valoraciones por parte del coordinador del Preventivo Especial, se produjeron menos incidentes sanitarios que en otras ocasiones. La mayor parte de las atenciones que prestaron fueron relativas a cortes, desvanecimientos y golpes.

Antes del inicio del desfile tuvo lugar el vuelco del tractor de una de las peñas participantes que provocó lesiones en una pierna a uno de los ocupantes y heridas leves al resto. A raíz del suceso, la peña decidió no participar en la Cabalgata.

En el dispositivo especial participaron más de 100 personas entre Cruz Roja, Policía Loca, Protección Civil, Bomberos y Guardia Civil.

Una vez finalizado el desfile, un equipo de trabajadores del Servicio de Limpieza Municipal salió a la calle a limpiar por donde había transcurrido la Cabalgata. Este equipo de limpieza contó con la colaboración de varios concejales del equipo de gobierno, así como el Alcalde de Jumilla Francisco Abellán, cumpliendo así el compromiso que anunció a todos los ciudadanos.